Fibroide

¿Qué es?

Los fibromas son tumores benignos formados por células musculares lisas y una proporción variable de tejido fibroso, que pueden desarrollarse tanto en niños como en adultos, persistir durante mucho tiempo, sin dar lugar a la aparición de síntomas graves.
Pueden desarrollarse en diferentes áreas del cuerpo. En las mujeres se desarrolla principalmente en el útero (fibromas uterinos) o en los ovarios (leiomiomas). Raramente se desarrollan dentro de la piel y en los huesos.

Clasificación

Los fibromas generalmente se clasifican por la forma, composición y ubicación:

  • Si tienen forma nodular se denominan nódulos fibroides;
  • Si tienen forma de pólipo, se denominan fibromas de pólipo;
  • El fibroma duro consta de muchas fibras y pocas células;
  • El fibroma blando consta de muchas células y pocas fibras;
  • Los fibromas intramurales crecen dentro de la pared uterina muscular;
  • Los fibromas pedunculados son fibromas que están adheridos al útero por tallos o tallos delgados llamados pedúnculos;
  • Los fibromas submucosos sobresalen en la cavidad uterina;
  • El fibroma osificante es una lesión ósea benigna de crecimiento lento que se asocia con mayor frecuencia a los maxilares;
  • Los angiofibromas son fibromas que contienen muchos vasos sanguíneos;
  • Los fibromas medulares renales son fibromas que surgen de las células intersticiales de la médula renal;
  • Los fibroxantomas son lesiones óseas benignas de niños y adolescentes.

Diagnóstico

Los fibromas generalmente crecen lentamente y casi siempre son benignos. En cualquier caso, siempre deben ser monitoreados, para evitar degeneraciones malignas.
Las principales pruebas que se realizan para el seguimiento de los miomas son:

  • Ultrasonido y tomografía computarizada;
  • Ultrasonido transvaginal para miomas ováricos y uterinos.

Causas

No se sabe qué causa los fibromas, pero los estudios muestran una mayor incidencia en personas obesas, en individuos de piel negra, en personas sujetas a traumatismos o en presencia de la misma condición en otros miembros de la familia.

Síntomas

Los fibromas son casi siempre asintomáticos. En las mujeres que tienen síntomas, los signos y síntomas más comunes de los fibromas uterinos incluyen:

  • Menstruación continua y abundante;
  • Dismenorrea;
  • Dolor pélvico;
  • Dificultad para quedar embarazada;
  • Riesgo de aborto espontáneo;
  • Infertilidad en casos severos;
  • Sensación de pesadez;
  • Hinchazón abdominal;
  • Micción frecuente;
  • Trastornos intestinales.

Terapia farmacológica

Los medicamentos utilizados para tratar los fibromas incluyen:

  • Los agonistas de la hormona liberadora de gonadotropina (GnRHa) reducen el tamaño de los fibromas uterinos y alivian los síntomas relacionados con los miomas en las pacientes;
  • Las píldoras anticonceptivas de estrógeno/progestágeno pueden ayudar a reducir la menstruación en caso de fibromas uterinos.

Sin embargo, dado que estos medicamentos no permiten la remisión de los fibromas, sino que solo permiten la reducción del ciclo menstrual, solo se usan para tratar estados de anemia crónica, debido a la menorragia.

Terapia quirúrgica

En caso de miomas múltiples, miomas muy grandes o miomas muy profundos, se requiere la extirpación quirúrgica a través de:

  • Laparotomía, una incisión quirúrgica en la cavidad abdominal;
  • Cirugía laparoscópica, técnica quirúrgica mínimamente invasiva utilizada en las áreas abdominal y pélvica. Utiliza la ayuda de un laparoscopio, una varilla telescópica delgada con una cámara en el extremo, para ver el interior de su cuerpo sin abrirlo por completo;
  • El procedimiento histeroscópico de extracción y recuperación de tejido se realiza insertando un pequeño tubo con un telescopio en el extremo (histeroscopio) a través de la vagina;
  • La embolización de fibromas uterinos es un procedimiento para reducir tumores no cancerosos en el útero llamados fibromas uterinos.

Remedios naturales

Existen varios remedios naturales para tratar los fibromas:

  • Los estudios científicos muestran un papel importante del té verde en la inhibición de la proliferación de fibromas;
  • Chasteberry reduce lentamente los fibromas;
  • El aceite de linaza, la onagra y la borraja tienen una acción antiinflamatoria;
  • La bolsa de pastor es un remedio herbal tradicional que a menudo se usa para reducir el sangrado. Es útil para bloquear casos de menorragia inducida por miomas;
  • Alnus incana o aliso gris reduce los fibromas uterinos o retarda su crecimiento;
  • La leche cardio y el diente de león tienen una acción desintoxicante para el hígado, que juega un papel importante en la regulación hormonal;
  • Ginkgo biloba ayuda a mejorar la dismenorrea asociada con los fibromas;
  • Masajear el abdomen con aceite de ricino tibio puede ser una excelente manera de aliviar los síntomas de hinchazón o dolor abdominal.

Dieta

Una dieta desintoxicante es la más indicada para los pacientes con miomas, ya que una sangre limpia y fluida permite una mayor reabsorción de los miomas.
El objetivo principal de la dieta tiene que ayudar a equilibrar los sistemas hormonales y endocrinos, así como los órganos excretores como la vejiga, los riñones y el hígado.
Los alimentos que deben incluirse en la dieta son:

  • Cereales integrales, ricos en vitaminas y minerales;
  • Alimentos ricos en hierro y vitamina C para reducir los efectos de la anemia, debido a la menstruación abundante. Las espinacas, el brócoli, la rúcula, las verduras de hoja verde oscuro, las legumbres, la soja, los frutos secos, las carnes rojas o blancas, los huevos y el chocolate negro son excelentes fuentes de hierro. Los alimentos ricos en vitamina C son todos los vegetales de hoja verde oscuro y los cítricos;
  • Alimentos ricos en vitamina A como zanahorias, papas, repollo, cítricos y espinacas;
  • Verduras de hoja verde como brócoli, espinacas, acelgas, rúcula, ricas en vitamina K antihemorrágica y moléculas antiinflamatorias. Además, son ricas en fibras. Incluir estos alimentos en la dieta reduce el riesgo de fibromas;
  • Es mejor evitar todos los alimentos inflamatorios, como leche y derivados, salami, azúcares simples, café, té, alcohol y productos envasados en conserva o latas.