Acidez gástrica

¿Qué es?

La acidez estomacal, también conocida con el término científico pirosis, es una condición patológica, que padece una de cada diez personas.
Es un trastorno del sistema digestivo, caracterizado por un aumento de la secreción de ácido clorhídrico. Los síntomas, o una fuerte sensación de ardor, se vuelven más crónicos cuando la secreción de ácido clorhídrico supera a la de la mucosidad, con una acción protectora contra la mucosa gástrica, generando inflamación o irritación, notoria en la parte superior del abdomen.
La aparición de acidez gástrica puede deberse a diversos factores, de hecho se considera una condición patológica con causas multifactoriales y, en algunos casos, de difícil diagnóstico.

Causas

La acidez gástrica puede depender de varios factores como:

  • Estrés;
  • Ingesta frecuente de alimentos muy condimentados;
  •  Ingesta frecuente de alimentos que estimulan la secreción gástrica como tomates, cítricos, cebollas, café, azúcares refinados, huevos, leche y derivados, frijoles y consumo frecuente de carnes;
  • Alcohol;
  • Humo de cigarro;
  • Medicamentos como antiblásticos o anticancerosos, antidepresivos como fluoxetina, anticoagulantes como ácido acetilsalicílico y warfarina, antiinflamatorios o medicamentos con cortisona;
  • Comidas copiosas;
  • Helicobacter pylori, bacteria responsable de la aparición de gastritis crónica, con síntomas como hipersecreción gástrica y pesadez digestiva.

Síntomas

Según en qué región anatómica del estómago se localice la inflamación o la sensación de ardor, podemos distinguir diferentes formas de acidez:

  • Si la sensación de ardor afecta a la zona central del abdomen y se produce después de una comida copiosa, hablamos de acidez gástrica y por tanto se desarrolla una inflamación en el estómago.
  • Si la sensación de ardor surge entre comidas, por la noche después de la cena y se atenúa con la ingestión de alimentos, se denomina acidez duodenal y por lo tanto se presenta inflamación en la mucosa del duodeno.
  • Si la sensación de ardor comienza desde la parte inferior del estómago hasta el cuello y las mandíbulas, se denomina reflujo gastroesofágico. En este caso, el ácido del estómago viaja hacia arriba desde el estómago hacia el esófago. Esto sucede cuando la válvula entre el estómago y el esófago, conocida como esfínter esofágico inferior, no se cierra correctamente. Dolor que empeora al acostarse o agacharse.
  • A veces, el reflujo gastroesofágico puede ser la causa de una hernia hiatal, que ocurre cuando la parte superior del estómago sobresale a través del diafragma hacia la cavidad torácica. La hernia hiatal es una condición patológica muy común que afecta aproximadamente al 40-60% de la población mundial.
  • Es importante recordar que la acidez estomacal muy a menudo también depende de factores emocionales, como la ansiedad o las alteraciones del carácter.
  • Las malas conductas alimentarias son factores cruciales para el desarrollo de la acidez estomacal.

Diagnóstico

Cuando los síntomas se vuelven muy llamativos, es recomendable realizar una visita gastroenterológica específica, con el fin de identificar las causas y emprender la terapia más eficaz. Las pruebas que realiza el gastroenterólogo en casos de acidez gástrica son generalmente las siguientes:

  • Radiografía de esófago, estómago o intestino para identificar qué mucosa esofágica, gástrica o duodenal ha sido dañada por la hiperacidez.
  • La PHmetría esofágica es una prueba específica para cuantificar la cantidad de ácido en el estómago o proveniente del estómago;
  • La manometría esofágica es un examen que analiza los movimientos del esófago y el esfínter gastroesofágico, o la válvula muscular interpuesta entre el extremo del esófago y la boca del estómago.

Curas y remedios

La terapia de tratamiento de la acidez puede ser farmacológica o basada en la aplicación de remedios naturales. Lógicamente, tras una visita precisa, el especialista competente decidirá qué terapia implementar como cura para el paciente en cuestión.

Farmacológicos:

En cuanto a los fármacos, se pueden prescribir antiácidos, con función alcalinizante y por tanto tamponadora del pH fuertemente ácido, entre los que el fármaco más utilizado y prescrito por los médicos para la enfermedad en cuestión es el maalox.
Maalox posee átomos alcalinizantes como el hidrato de magnesio Mg (OH) 2 y el hidrato de aluminio Al (OH) 3, frente a otros antiácidos tiene la ventaja de presentar un mecanismo de acción más duradero y tiene una capacidad de absorción más lenta, por lo que no para alterar el pH de la sangre.
Los medicamentos adicionales prescritos son inhibidores de la bomba que se unen a la bomba de protones expresada en la superficie de las células de la mucosa gástrica, inactivándola, donde el progenitor de esta categoría es el omeprazol.

No farmacológico:

La terapia no farmacológica implica cambios en el estilo de vida y la nutrición del paciente. Los cambios en el estilo de vida que pueden ayudar en caso de acidez estomacal son:

  • Dejar de fumar;
  • Reducir la dosis de fármacos que predisponen a la hiperclorhidria;
  • Reducir el consumo de alcohol,
  • Evitar usar ropa ajustada o cinturones apretados;
  • Evitar acostarse o acostarse inmediatamente después de comer,
  • Durante el descanso es importante mantener la cabeza levantada unos 10-15 cm.,
  • Evitar aquellos movimientos que aumenten la presión abdominal,
  • Evitar picar después de la cena para no aumentar la secreción gástrica nocturna.
  • Obesidad, donde la grasa visceral provoca una mayor presión sobre el estómago, favoreciendo el ascenso del contenido gástrico,
  • Cambios en la nutrición del paciente.

Consejos de comida

  • Es importante eliminar la ingesta de bebidas que aumenten la secreción gástrica, como el café y las bebidas carbonatadas, incluida el agua mineral.
  • Es importante eliminar los alimentos que estimulan la hiperacidez como tomates, cítricos, cebollas, café, azúcares refinados, huevos, leche y derivados, frijoles y consumo frecuente de carnes.
  • Es recomendable en caso de acidez gástrica, consumir fruta entre horas.
  • Preferir al vapor oa la parrilla, evitar freír, con acción irritante sobre la mucosa gástrica.
  • Los quesos ricos en grasas tienen una acción corrosiva sobre la mucosa gástrica.
  • El agua protege la mucosa gástrica del ataque de los jugos gástricos, es importante beber 2-2,5 litros de agua al día.
  • La leche tiene una acción temporal sobre la atenuación de la acidez estomacal, gracias a su capacidad neutralizante y tamponante. Sin embargo, en el caso de que se tome en grandes cantidades, puede tener efectos contraproducentes y estimulantes de la secreción gástrica, al ser un alimento con un alto contenido en proteínas.
  • Evite las comidas copiosas, lo óptimo sería, para la mejoría de los síntomas, seguir una dieta disociada.
  • Es necesario comer despacio y masticar correctamente durante las comidas, ya que existen enzimas en la saliva que inician una primera digestión de los alimentos, facilitando posteriormente la actividad gástrica.
  • Comer apresuradamente, tragar los alimentos, aumenta la acidez estomacal o el reflujo, ya que aumenta el tiempo de permanencia de los alimentos en el estómago. Por eso es fundamental que la masticación sea muy lenta y que la dieta se divida en cinco comidas repartidas a lo largo del día, en lugar de dos comidas copiosas.